martes, 18 de diciembre de 2012
domingo, 25 de noviembre de 2012
SE PREPARA LA ESTAFA
domingo, 14 de octubre de 2012
LE CHEVALIER DE SAINT-GEORGES "EL MOZART NEGRO": MAESTRO DE MARIE ANTOINETTE
“Es un hombre
alto y admirablemente hecho, y cuyas facciones, a pesar de su tinte moreno,
tiene nobleza, cierto encanto, sobre todo mucha expresividad. Se afirma que las
damas aprecian a este medio negro, porque sobresale en montar a caballo, en
tiro con armas, en tocar el violín y patinar, que porque esta dotado, se dice,
de una virtud Hercúlea que nuestro sexo pasa a buscar en estos tiempos de incontinencia”
Chevalier 2023 por Stephen Williams |
Guillaume-Pierre esperaba que su noble herencia hiciera que otros pasaran por alto el color de piel de su hijo. No fue así: para muchos, Joseph todavía era solo un medio negro, un mulato, que no era digno de la sangre noble de su padre. Debido a que la ley francesa impedía que Guillaume-Pierre pasara el nombre aristocrático de Tavernier de Boullongne a su hijo mulato, nombró a Joseph chevalier o caballero. Agregó Saint-George, el nombre de la plantación de su familia, y de Boulogne, una variación del apellido. Chevalier era el título de rango más bajo que podía tener un noble, pero era mejor que ningún título.
Partido de esgrima entre St.-Georges y el diplomático y espía francés travestido La Chevalière d'Éon el 9 de abril de 1787, por Abbé Alexandre-Auguste Robineau. |
Aun así, Joseph fue objeto de burlas por el color de su piel. "Mestizo" y "mal blanqueado" fueron susurrados lo suficientemente alto como para que él los escuchara. “Ten cuidado, Joseph Aunque eres hijo de un noble blanco, también eres hijo de una mujer negra”, decía Nanon cuando Joseph se defendía con los puños o la espada.
Imagenes de un docudrama sobre la vida del Chevalier de Saint-Georges. |
En su vigésimo primer cumpleaños, Joseph recibió un hermoso y costoso violín, hecho por Nicolò Amati, maestro del mundialmente famoso fabricante de violines Stradivari.
Chevalier 2023 por Stephen Williams |
El público se sintió transportado, secándose los ojos con pañuelos y comentando sobre el glorioso Joseph de treinta años, Chevalier de Saint-George, que podía hacer llorar a un violín como si le hubieran roto el corazón.
En 1774, Joseph comenzó a componer Ernestine, la primera de sus seis óperas, y una variedad de cuartetos, conciertos y arietas conmovedoras. Durante una actuación, un joven se sentó entre la multitud, cautivado. La melodía inusual al final de una de las piezas de Joseph se quedó con él mucho después de que se detuviera la interpretación. Rebosante de inspiración, regresó a Viena, donde comenzó a trabajar en su Sinfonía Concertante para violín y viola. El joven era Wolfgang Amadeus Mozart.
Le Chevalier de Saint-Georges por Mather Brown. |
Las noticias sobre los talentos de Joseph viajaron más allá de París. Después de una actuación, un hombre uniformado le entregó un sobre grabado con el escudo de armas real. leyó el hombre en voz alta, “'Su Majestad solicita el honor de su presencia en la residencia real de Versalles, para actuar ante Su Majestad, el Rey Luis XVI, y Su Majestad, la reina María Antonieta…' ”
¡Espléndido, señor de Saint-George! dijo la reina, sonriendo, y toda la corte real prorrumpió en aplausos.
El coche se detuvo frente a una de las pequeñas puertas de
Trianon.
"¿El rey se ha ido, Bazin?" dijo M. de Crussol al mayordomo de María Antonieta. - !por la izquierda! respondió Bazin, mirando a Saint-Georges con desconfianza. M. de Crussol despidió a Bazin, cruzó la galería y, girando el pomo de cristal de otra puerta en arco, hizo pasar a Saint-Georges a un salón adornado con espejos.
Emilia Schüle como la reina francesa y Yoli Fuller como el Caballero de Saint-Georges, apodado el Mozart Negro en la miniserie: Marie Antoinette 2022 |
Este apartamento de tamaño medio estaba perfumado con el
dulce aroma que desprenden las plantas aromáticas. Varios jarrones de pórfido
contenían flores raras del invernadero de Trianon. Un arpa y algunas obras de
sola mujer tirada sobre una mesita incrustada de marquetería interrumpía la
armonía de los muebles, que eran azules.
La reina entró casi al mismo tiempo que M. de Crussol; sostenía una rosa blanca entre sus dedos. La princesa de Lamballe siguió a la reina. María Antonieta hizo una señal al capitán de la guardia para que se fuera; M. de Crussol obedeció.
Marie Antoinette by Sofia Coppola |
Mientras le hablaba así al caballero, su emoción era
visible, se reflejaba incluso en los movimientos temblorosos de su cuerpo.
La reina estaba de pie; su cabello medio enrollado le
caía por las mejillas tan blanco como el de Leda. La señora de Lamballe,
retirada a un rincón del salón, había cogido un lienzo de bordado descompuesto.
ella le entregó la rosa blanca... Él tomó la flor y besó la mano real que María
Antonieta le presentó.
El Chevalier de Saint-Georges con uniforme de policía de rey. sera condecorado con la orden de Malta bajo Luis XVI. |
Pasó sus últimos años luchando para abolir la esclavitud en las colonias. Joseph nunca se casó y no se sabe mucho sobre lo que pasó con su madre y su padre.
Murió el 10 de junio de 1799, a la edad de sesenta años, un auténtico renacentista del siglo XVIII.
En 2001, el ayuntamiento de París dedicó una calle, Rue du Chevalier de Saint-George, en su honor.
domingo, 30 de septiembre de 2012
LOS CARNAVALES DE PARIS!
La imaginación popular recrea la atmosfera de gran parte de esta fiesta de la noche de lujo. Las calles abigarradas de multitud vestida con trajes de diferentes colores, la mayoría de los participantes usaban el código de vestimenta: sombrero de copa y abrigo negro para los hombres; domino y vestidos brillantes para las mujeres, pero también pudo ser visto trajes extravagantes tales como los exhibidos por las figuras de la comedia francesa. El baile en la opera fue una oportunidad para los espectadores admirar los trajes elegantes de las mujeres de la alta sociedad.
En el Mardi Gras o martes gordo, el ultimo día antes de la cuaresma fue la ocasión para relaciones subidas de tono, obscenos bailes de mascaras. Desfiles ruidosos se presentaban por las calles de parís con el “buey gordo” una estatua de un toro coronado con espada y cetro, acompañado con el sonido de violines, pífanos y tambores. Las barreras sociales, el buen gusto y todas las reglas de conductas aceptables quedaban en el camino. La iglesia protesto y critico en vano estas festividades.
“usted tiene razón para temer los malos efectos de la disipación de mi hija y su gusto por los laceres ruidosos, tan contrario al carácter del rey” (Marie teresa al conde Mercy, abril de 1775).
“la clase verdadera es hacer que los demás se sientan cómodos” y esto era un don que María Antonieta tenia en abundancia. Paso gran parte de su tiempo en el Mardi Gras, bailes, fiestas, banquetes, fuegos artificiales y festejos lanzados en parís y Versalles.
“espero el final de este carnaval con impaciencia, junto con la disipación excesiva en que la reina se ha permitido… durante las últimas tres semanas, el abate de Vermond solo ha tenido unos breves momentos en los que hablar de cosas serias, ella misma dice que es demasiado profunda en sus diversiones para pensar en otra cosa” (el conde Mercy, 20 febrero de 1775).
“Gracias a dios, este carnaval eterno ha terminado!, esa exclamación me hará ver vieja, pero debo admitir que todas esas horas en la noche deben cansarte mucho y temo por tu salud; el orden de sus hábitos usuales, lo cual es un punto esencial. Toda lectura, todas las otras ocupaciones se han interrumpido durante dos meses… cuando uno es joven, uno no piensa en ello, a medida que envejecemos uno se da cuenta…” (Marie teresa a María Antonieta, 5 marzo de 1775).
El carnaval de 1777 fue mucho más brillante que los anteriores, el delirio de placeres de la reina alcanza el punto culminante. “apenas oye cuando se le dice algo –se lamenta Mercy- y casi nunca existe la posibilidad de tratar con ella de ningún asunto serio a importante o de atraer su atención hacia una cuestión trascendental. La sed de placeres ejerce sobre ella un poder misterioso”. Es como si un demonio se hubiese posesionado de la joven señora, jamás su agitación y su inquietud fueron más irrazonables que en este decisivo año. Según las impresiones de este carnaval tenemos el intinerario de la reina: “su majestad asistió el 30 de enero al baile de la opera que duro hasta las cuatro de la mañana, luego asistió a la casa de campo del duque de Orleans donde asistió a la fiesta de graduación de la opera. El 6 de febrero un nuevo baile fue dado por el duque de Chartres y coincidió de con el de la opera. La reina se mostro en los dos eventos y no regreso a Versalles hasta las seis de la mañana. El domingo 9 de febrero asistió de nuevo al baile de mascaras, el lunes de carnaval dio un baile en Versalles y en el Mardi Gras se dio otra que duro hasta las nueve de la noche, luego que la cena había terminado, se fue a parís al baile de la opera donde permaneció hasta las seis de la mañana”. Así termino el carnaval de 1777.
Al final de estos carnavales muchos observadores indiferentes murmuraron que se veía enferma y había adelgazado, estas ruidosas diversiones habían sido demasiado para sus fuerzas. Según el conde Mercy: “ya era hora de entrar a la cuaresma, porque la salud a largo plazo de la reina podría tener un efecto dañino por su tipo de vida tan agitada. Su majestad está más delgada, se fatiga y siente escalofríos. Su doctor está un poco inquieto, y de hecho, este pequeño inconveniente no le impidió a la reina negarse a asistir el viernes pasado a la opera”.
Después del carnaval, llego el comienzo de la cuaresma y fue una temporada de la renuncia tomada muy en serio en Versalles, en especial por Luis XVI, que era muy devoto; habiendo sido criado en un ambiente católico romano desde niño, María Antonieta también era escrupulosa en las observaciones de las leyes religiosas y el mandato devocional para la cuaresma por sus sacerdotes y confesores. Por su puesto una vez terminado el carnaval, Marie teresa estaba más que dispuesta a regresar a sus advertencias más habituales con respecto al comportamiento de su hija.
Según el conde de Mercy: “la diversión de la temporada de carnavales ha causado vigilias tan frecuentes y tan incompatibles con el proceso de la vida cotidiana del rey… tras pasar el carnaval, la reina ofreció al rey sacrificar los bailes y espectáculos para pasar las tardes con él”.
domingo, 9 de septiembre de 2012
LAS CARRERAS DE CABALLOS!
lunes, 3 de septiembre de 2012
domingo, 2 de septiembre de 2012
MARIE ANTOINETTE RECIBE CON HONOR AL ALMIRANTE SUFFREN
domingo, 26 de agosto de 2012
EL ZAR PABLO I EN FRANCIA (1782)
Aplausos saludaron la llegada a Francia del gran duque pablo, catalina no parecía muy sensible. “la emperatriz no ama ni a Francia ni a su hijo” escribió el marques de Verac. Indulgente con Luis XVI, catalina detestaba a María Antonieta: “si la reina de Francia se parece a la cara del emperador (José II), se encontrara la misma similitud en su conversación…”; se burla también de la frivolidad: “Dios bendiga a la reina muy cristiana, sus pompones, sus bailes y sus programas bien o mal organizados! Yo no siento que le moleste solo digo la verdad”.
En palabras de la señora Campan: “la reina los recibió con gracia y dignidad. El día de su llegada a Versalles, cenaron en privado con el rey y la reina. La apariencia simple sin pretensiones de pablo complace a Luis XVI. El le hablo con mas confianza y alegría de lo que había hablado con José II. La condesa de Nord no tuvo en el primer momento mucho éxito con la reina… cuando fueron presentados a la reina estaba muy nerviosa, ella se retiro a su apartamento antes de la cena con los ilustres viajeros y pidió un vaso de agua confesando “que acababa de experimentar lo difícil que es hacer el papel de reina en presencia de otros soberanos o príncipes destinados para serlo, que estar ante cortesanos”. Pronto se recupero de su confusión, y volvió a aparecer con facilidad y confianza. La cena fue bastante alegre y una conversación muy animada”.
Pablo realmente quedo admirado por la pompa de Versalles, los uniformes y trajes, el mundo animado, libre, dispuesto expresamente a la vista como un escenario de opera, los hombres obra maestra de la sofisticada elegancia, las mujeres de una exquisita postura casi virginal; estaba encantado.
La gran duquesa, María Feodorovna |
Por la noche se realizo un concierto, el castillo fue iluminado con mil lámparas de arañas, dando la idea del esplendor y la riqueza de la corte de Versalles. Madame d`Oberkirch apenas podía encontrar palabras para describir la impresión de la belleza de María Antonieta: "El baile fue estupendo; la Reina bailó con el Gran Duque; Tiene un busto y un porte maravillosos. Me encontré por un momento detrás de ella y detrás del Gran Duque. La reina estaba maravillosamente hermosa, unos ojos fascinantes. Era absolutamente imposible para cualquiera mostrar una mayor gracia y nobleza en su actitud como ella”.
La señora d`Oberkirch, como ella, era alemana de nacimiento y María Antonieta le rogo hablar alemán para recordar su lengua materna, pero se encontró con que casi lo había olvidado. “ah”, dijo, “el alemán es un idioma bueno, pero el francés, en las bocas de mis hijos, me parece el mejor idioma del mundo”.
La señora d`Oberkirch |
“En un momento en que los viajeros distinguidos habían pasado el día en el Trianon a solas con la reina, la intimidad estaba tan bien establecida que las confidencias del duque a la reina causaron algunos puntos que su majestad sintió un poco de vergüenza. El príncipe le hablo con un poco de amargo la costumbre, la incomodidad y la molestia en su experiencia en san Petersburgo… el príncipe, creyéndose con derecho de convocar a la confianza, le rogo a la reina que le Explicara cómo, durante la vida de Luis XV, se había comportado con la condesa du Barry. Su majestad prestada para explicar, diciéndole que la base de su conducta en ese momento era evitar cualquier cosa que hubiera conmocionado al monarca fallecido y omitir toda la marca de aprobación de la favorita” (el conde Mercy a José II).
Estas confidencias entre María Antonieta y los príncipes crearon una verdadera amistad. La duquesa tenía para el delfín, que aun estaba en pañales, miradas y sonrisas que iban directo al corazón de la reina.
De regreso a Versalles pablo se reunió con el odioso duque de Orleans. El zarevich había oído que este hombre patrocinaba abiertamente las canciones trasmitidas por las cábalas contra María Antonieta: “ el rey de Francia es paciente- dice- Si mi madre tuviera un primo así, el no se quedaría mucho tiempo en Rusia”.
Finalmente el futuro zar de Rusia abandono Francia muy contento y agradecido por la hospitalidad, el conocimiento y lugares visto. Además de prometer que su país seria su aliado en todo lo que desearan.
domingo, 12 de agosto de 2012
LA REINA MARIE ANTOINETTE SE NIEGA A RECIBIR A VOLTAIRE (1778)
Retrato anónimo de Voltaire (1694-1778), realizado en el siglo XVIII. |
El Escritor francés de la Ilustración, Voltaire bendice al nieto de Franklin. Grabado. |
Coronación de Voltaire en el Theatre Francais - Escuela de Francés |
Placa de Romance of Madame Tussaud's (1921): el "Sócrates moribundo" era una pieza muy conocida; presumiblemente fue destruido en un incendio en la fábrica de cera en Baker en 1925 |