domingo, 3 de abril de 2016

5 DE OCTUBRE DE 1789: SEGÚN LOS RELATOS DE MADAME ROYAL


“… las puertas de hierro del castillo estaban llenas de vagabundos, dirigidos, según se dijo, por el duque de Orleans, de un momento a otro se precipitaron a los apartamentos de mi madre. La guardia suiza estacionados de pie en la escalera trataban de obstaculizar la entrada… pero la turba de villanos entraron en la sala de los guardias de corps, hiriendo y matando a aquellos que trataron de oponerse a su paso. Dos de estos guardias, llamados Miomandre de Sainte-Marie y Durepaire, aunque gravemente heridos, se arrastraron hasta la puerta de mi madre, gritando en voz alta detrás de ella. Su celo fue recompensado con crueldad, los desgraciados se arrojaron sobre ellos y los asesinaron.


Mientras tanto, los gritos de los insurgentes despertó al cuerpo de guardia que corrió hacia la puerta y echo cerrojo. Mi madre salto de su cama y, a medio vestir, corrió a los apartamentos de mi padre, pero la puerta de la misma estaba cerrada con llave desde adentro, y los que estaban allí, al oír el ruido, pensaron que se trataba de manifestantes que intentaban entrar. Afortunadamente un hombre de guardia llamado Turgy, después de haber reconocido la voz de mi madre, abrió la puerta de inmediato.

En ese mismo momento los desgraciados forzaron la puerta de la habitación de mi madre, de modo que en ese instante, unos minutos más la habrían encontrado sin vía de escape. Tan pronto como entro en las habitaciones de mi padre, ella lo busco pero no lo encontró allí, él después de haber oído que estaba en peligro había corrido a su apartamento, pero tomo otro camino. Afortunadamente, se encontró con mi hermano, que lo trajo la señora de Tourzel, que le insto a regresar a sus habitaciones, donde se encontraba mi madre esperando con ansiedad mortal…”