Es el más soberbio collar de diamantes que vieron los siglos: 647 piedras, 2800 quilates y tasado en 1600.000 libras. Los joyeros de la corte, bohmer y bassenge habían sido encargados por Luis XV para hacer un collar salvajemente extravagante para su amante, madame du barry. Desafortunadamente para ellos las viruelas se llevaron al soberano antes de que la pieza se completara y la que antes fue su amante se quedo sin los diamantes.
Después de intentar infructuosamente de de hacerse de la pieza en los demás tribunales de Europa. Bohmer visito de nuevo a la reina, desesperado le rogo comprarlo o debería matarse ya que estaba en la quiebra. La reina, decidida le aconsejo romper el collar y vender las piedras para superar sus dificultades. La reina dijo: “le he dicho varias veces que nunca iba a añadir tantos quilates a mi colección actual de diamantes. Me negué a comprar el collar, el rey se ofreció a comprarlo para mí como un regalo y yo me negué. Le pedí no volverlo mencionar otra vez”.
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